La experiencia
educativa
Educación laica e integral. Inicial, Primaria y Secundaria con grupos reducidos y horario completo en el corazón del Prado.
Nuestra propuesta es integral, diversa y laica; desde nuestros orígenes, hace más de 30 años, nos hemos dedicado con esmero y cariño a la tarea de formar personas sanas, competentes, solidarias y alegres.
Nuestra propuesta es integral porque integral es la forma en que concebimos a los alumnos: como personas plenas, con sus cuerpos, sus emociones y sentimientos, sus opiniones y convicciones, sus proyectos de vida, su visión del mundo, sus deseos de futuro. El camino del autoconocimiento es un pilar fundamental de nuestra tarea, así como el compromiso con lo colectivo, con el entorno y con el planeta.
En nuestra filosofía, la integralidad viene de la mano de la laicidad: si pensamos a las personas de forma integral, tenemos que pensar la experiencia educativa como una experiencia de libertad. No profesamos ninguna doctrina religiosa ni política, pero tampoco censuramos su expresión: en el Idejo son bienvenidas y celebradas todas las expresiones personales, siempre que sucedan dentro de un marco de genuino respeto y cuidado de las personas.
Toda nuestra propuesta apunta a la formación de personas plenas, al desarrollo de su dimensión intelectual, emocional, física y social. Los alumnos pasan gran parte de su tiempo en la escuela o el liceo; aquí tienen a la mayoría de sus amigos, aquí comen todos los días, aquí generan recuerdos que los acompañarán por muchos años…

Nuestra vocación es hacer de ese pasaje una experiencia enriquecedora y feliz, en la que no solo adquieran conocimientos, sino también, y especialmente, sensaciones y valores; de amor propio y autoconocimiento, de autocuidado y cuidado de las demás personas, de cooperación y solidaridad, y de respeto y alegría por la diversidad.
Fuimos pioneros en la incorporación del yoga y espacios de armonización a nuestra dinámica cotidiana y en todos los niveles, desde los más chiquitos hasta los más grandes.
Cada día empezamos y terminamos la jornada con una instancia que llamamos meditación y consiste en diez minutos de armonización y relajación. Esto nos ayuda a disponernos para trabajar a la mañana y a volver a la calma antes de volver a casa a la tarde. La práctica del yoga es semanal y brinda a los alumnos una herramienta para toda su vida: un momento para escucharse a sí mismos, su cuerpo y sus emociones.
Ambas prácticas se han ido adaptando a la realidad de cambio en la que vivimos así como a cada etapa en el desarrollo de los alumnos; desde los más chicos en Inicial hasta los jóvenes en Secundaria.
En esta búsqueda de integralidad del ser, ocupa un lugar preponderante el arte y su expresión a través de las artes plásticas, la música y la expresión corporal.
A través de todo su crecimiento y desarrollo los alumnos experimentan con diferentes modalidades y disciplinas, descubren nuevos intereses y tienen la posibilidad de expresar sus deseos e inquietudes, encontrar «su centro». Además de los espacios de armonización, la actividad física y los idiomas también son transversales a todas las etapas de nuestra propuesta.
En todos los niveles hacemos un fuerte énfasis en lograr una relación sana y enriquecedora con la tecnología, incorporándola creativamente a la dinámica de enseñanza y aprendizaje ,a la vez que siendo críticos y reflexivos respecto de su uso personal y social.

Además de las actividades, nuestra propuesta también incluye el juego, el ocio, el esparcimiento y el contacto con la naturaleza. Los recreos son momentos desestructurados, de encuentro y de juego libre.
Estamos ubicados en el corazón del Prado y nuestra casa cuenta con toda la infraestructura necesaria, no solo para las clases, actividades y talleres, sino también para el juego, la recreación y el esparcimiento.